Adiós, adiós 2024

 

Querido 2024

 Ufff!!... uff.. uff!!... cuántas taquicardias me has dado!, infinitas noches de miedo, toneladas de angustia, desesperación y varias frustraciones entre pérdidas significativas y decepciones. 

Cuando ya empezaba a acostumbrarme a tu ritmo desafiante y rígido, me sorprendes!. 

Entre la vida y la muerte, la sangre borbotea, late. La virgen Desatanudos mete la mano y el hilo de plata no se corta. 

Me ofreces un racimo inmenso de buganvilias (también se puede escribir con "m" y "b") explotadas de colores, intensos violetas, difusos amarillos, blancos sucios, rojos profundos y las caricias del sol dorando mi piel.

Ahora los ojos empolvados de horror, parecen aceitunas. Los días se hacen más largos, intensos, seguros. 

Los oídos descansan en paz. Los pájaros rozan mi cabeza y aunque algunos, a veces, se me piantan en la incertidumbre, una respiración profunda, me susurra "confía." 

Todo ha sido muy traumático, extremista, delicado, la iguana con su escopeta a la defensiva siempre. Estuvimos todos estos meses en modo "vivir" o "fuera de juego", pero la verdad, ¿Quién no?.

 Apenas, puedo evocar, momentos "entre comillados" felices; de esos que la gente normal, disfruta. Y sin embargo, las bendiciones han sido extremas:La vida,  la amistad sincera, la presencia genuina, el amor real. 

La correspondencia, la retribución, la soga salvavidas, el mensaje oportuno, el tiempo, la disposición y el silencio.

Me siento aliviada, porque no quería llegar a hoy con la boca llena de insultos. 

Y aunque ahora mismo, te vuelves reticente y quieres tirar por la borda mis palabras, aún te quedan varias horas para pintarme una inmensa sonrisa en el corazón.

Gracias, 2024.